Los hechos reales sobre la Dureza en el Agua. Cómo la eliminación de manchas minerales aumenta el cuidado de la ropa

La clave para un lavado más suave y limpio es controlar los minerales en el agua. Los tejidos se endurecen durante el proceso de lavado por depósitos de la dureza en el agua o por el detergente seleccionado. Por ejemplo, el Carbonato de Sodio que se usa en algunos detergentes puede reaccionar con minerales solubles en el agua, con lo cual se crea un Carbonato de Calcio que se incrustan en el tejido.

Las fibras del tejido que normalmente yacen suaves y en forma uniforme una junto a la otra, se vuelven quebradizas y ásperas cuando se saturan de Carbonato de Calcio (CaCo3). Los polímeros como Sokalan^® PA y Sokalan^® CP proporcionan una reducción considerable de la fijación de este elemento.

Al igual que los agentes quelantes, los polímeros como Sokalan^® hacen la labor de inhibidores de incrustaciones, pero de manera diferente: no permiten la formación de cristales dentro de una incrustación, con lo cual mantienen los cristales microscópicos dispersos y no permiten que se formen yacimientos en los tejidos.

Para obtener la mejor inhibición de incrustaciones, es importante igualar el tipo de sales que se encuentran en el agua, con el polímero más eficaz en la prevención de formaciones de incrustaciones de ese compuesto en específico.

Sokalan^® PA (15, 25, 30) y Sokalan^® CP (5, 7, 10, 12) producen el mejor resultado cuando se trata de sales de Carbonato de Calcio (CaCO3), y Sulfato de Calcio (CaSO4). Cuando se tiene una incrustación de tipo silicato, Sokalan^® CP 50 o Sokalan^® CP 42 funcionan mejor. Casi todos los productos Sokalan® tienen algún beneficio anti-incrustación.

Debido a que es difícil medir la incrustación en tejidos, normalmente se realiza una prueba, para mostrar el rendimiento de inhibición de incrustaciones. Se quema el tejido previamente lavado y se mide la ceniza que queda, para ver la incrustación. Como se muestra en la figura siguiente, Trilon^® M reduce considerablemente el incrustamiento cuando se incorpora en una relación del 5%, y todavía más notorio, cuando se incorpora al 8%.